Hace prácticamente dos décadas vio la luz la última evolución del galardonado F1 GTR, el McLaren F1 GTR 'Longtail'. Aquel espíritu competitivo que consiguió una asombrosa victoria el año 1995 en Le Mans, contra prototipos mejor preparados para la competición, y terminó trasladándose a su última transformación, es el que hoy da lugar a un vehículo que nace en el circuito para salir a la carretera. Convierte la conducción en una sensación nunca antes vivid. Ese no es otro que el McLaren 675LT.
Porque más allá de dotar al modelo de una mayor potencia, de rebajar todo lo posible su peso y otorgarle una mayor precisión en todos los sentidos, la esencia de una experiencia visceral al volante continúa sin cambiar un ápice. El 675LT, el más exclusivo supercar de McLaren jamás construido en serie, ha venido para convertirse en viva historia del fabricante británico.
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Este modelo concebido especialmente para las pistas, pero con homologación para circular sin ninguna clase problema por nuestras calles y carreteras, parte del 650S para construirse con un tercio de componentes específicos y un motor V8 biturbo de 3,8 litros que alcanza los 675 caballos de potencia con un par máximo de 700 Nm. En conjunción con el adelgazamiento general al que ha sido sometido el vehículo, con empleo general de materiales más livianos como la fibra de carbono, el titanio, el policarbonato o el magnesio y la eliminación del sistema de climatización en la dotación de serie, el bloque ha reducido su peso. Un centenar de kilos su peso respecto al coche del que parte y le permiten mejorar números.
Así, este McLaren 675LT es capaz de alcanzar los 100 kilómetros por hora desde parado en 2,9 segundos, los 200 en tan sólo 7,9 —una impresionante cifra— y alcanzar una velocidad punta de 330.
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En cuanto a estética y diseño centrado en esta, el McLaren Super Series de calle más enfocado a los circuitos se presenta con un carácter más agresivo. Los responsables son un paragolpes delantero con splitter, grandes tomas de aire frente a los pasos de rueda de la parte trasera, alerón y difusor de carbono, notables faldones laterales y salidas de escape circulares fabricadas en titanio. Para el interior, tapicería de alcantara, bacquets ultraligeros en dos colores con el logo del modelo bordado en el reposacabezas, sistema de infoentretenimiento y, sobre todo, una notable sobriedad.
Tras debutar en el Salón de Ginebra del 2015, el pasado verano empezamos a ver las primeras unidades sobre el asfalto. Desde el circuito con amor, desde las pistas para las calles, el McLaren 675LT.
