Villa Mathesis es un complejo de lujo situado en Zahara de los Atunes, una pequeña provincia de Cádiz. Entre Europa y África y entre el océano Atlántico y el mar Mediterráneo frente a la playa de los Alemanes, se encuentra esta joya arquitectónica, una construcción producto de la unión de dos socios, Badila y Labiano, que perseguían la idea de construir una casa moderna diseñada por un arquitecto de renombre.
Se fijaron en este enclave por su clima incomparable, pues en el estrecho de Gibraltar y desde la playa de los Alemanes se puede disfrutar de 330 días de sol al año con una temperatura media de 20ºC. Los arquitectos encargados de llevar a cabo esta obra fueron Alfonso Alzugaray y Carlos Urzanqui, quienes buscaban crear una atmósfera a partir de la luz natural. Su idea de la arquitectura es cuanto menos onerosa y prefieren la construcción del minimalismo antes que la novedad como objetivo.
Villa Mathesis
La villa es una casa llena de espacio construida sobre un acantilado orientado hacia África. Antes de su construcción, sus promotores observaron la parcela durante un año para garantizar paz, calma y tranquilidad lejos del tráfico y la contaminación acústica. Formada a partir de líneas puras, con el color blanco por excelencia y abundante cristalería. Para acceder a ella es indispensable la toma de un peculiar funicular que une el garaje privado de la villa con la vivienda.
Situada sobre una plataforma a media altura del acantilado, establece las distintas estancias de uso diario: salón, comedor, cocina, biblioteca, terrazas y solarium. En uno de los extremos se encuentra la piscina exterior de agua salada pensada para contemplar el amanecer. Bajo la altura de la piscina se encuentran los cinco dormitorios de características similares donde la tranquilidad y la intimidad son una garantía. Cada una de ellas cuenta con un baño privado y una terraza con vistas al mar, que por su estructura transmite la sensación de estar flotando en el aire ya que el suelo no se ve desde la misma.
Villa Mathesis
Toda la casa se encuentra climatizada para garantizar un clima idóneo y en todas las dependencias comunes se escucha una ligera música de fondo que acompaña a la tranquilidad y el desasosiego. Además, los propietarios junto a María del Carmen Granado, son los anfitriones que reciben y acompañan al huésped durante toda su estancia.
Una auténtica joya que conjuga arquitectura de renombre con un paraje incomparable. Villa Mathesis constituye una vivienda muy particular que desde agosto de 2012 recibe a los clientes más distinguidos que busquen una experiencia espiritual lejos del ruido de la ciudad.
