Exterior de una villa de La Posada de Somo
La Posada de Somo

La Posada de Somo, la escapada perfecta

Viajes

Íntima y exquisita, la Posada de Somo disfruta de una ubicación excepcional en la costa de Cantabria, un lugar ideal donde disfrutar y relajarse.

Somo es un pequeño pueblo situado al otro lado de la bahía de Santander, ciudad con la que se comunica tanto en coche como en barco. Está ubicado cerca de los principales lugares de interés turístico de Cantabria, pero si destaca por algo es por su larga playa de arena blanca que se extiende por más de siete kilómetros. Es un lugar ideal para los aficionados al senderismo y la náutica, con paisajes de calas vírgenes y hermosos acantilados.

Pero para los que buscan una experiencia más íntima, el propio pueblo de Somo ofrece decenas de rincones por los que pasear y descubrir parte del legado histórico y cultural de la zona. La Posada de Somo se encuentra en la parte alta del pueblo, lejos del bullicio turístico, lo que convierte a este hotel en un verdadero oasis.

Zona común de La Posada de SomoLa Posada de Somo

Uno de los grandes atractivos del hotel es su apuesta por el relax y la tranquilidad. Nada mejor que empezar el día con uno de sus desayunos especiales, preparados con alimentos de la zona y que son toda una delicia. Y es que para disfrutar de la gastronomía de la zona, La Posada de Somo es muy interesante. Ofrecen un servicio de cenas, tanto para disfrutarlo en la habitación o en las villas, o bien en alguno de los rincones más especiales del complejo. Intimidad y cenas tradicionales, preparadas con productos de temporada y de gran calidad.

Otro de los atractivos de este hotel son sus zonas comunes. Ofrecen varios espacios bien diferenciados en los que disfrutar de las impresionantes vistas o también de un entorno cálido y tranquilo. Si necesitamos más relajación, hay disponible un servicio de masajes a la carta para completar la experiencia, así como otros tratamientos de belleza.

Interior de una habtiación de La Posada de SomoLa Posada de Somo

En cuanto a las habitaciones, además de varias habitaciones bien equipadas e interesantes suites, habría que destacar sus villas.  Casas independientes de 30 a 45 metros cuadrados, algunas de las cuales tienen su propio jardín privado y jacuzzi. Grandes cristaleras y un diseño atrevido y vanguardista, mezclado con elementos rústicos y todos los pequeños detalles que hacen de este hotel el lugar ideal para una escapada de lujo.

Alfredo Álamo
Alfredo Álamo

Escritor, soñador, amante de los viajes largos y sin prisa, disfruto tanto con las cosas sencillas como con los últimos gadgets tecnológicos, con los lugares solitarios y los conciertos abarrotados, la comida tradicional y la nueva gastronomía. Contradicciones, creo, que hacen la vida mucho más interesante.