Reloj de diamantes Piaget Possession
Piaget

Piaget Possession, un pequeño gran reloj de diamantes

Relojes

Piaget Possession es una colección que toma un simple gesto, el del giro, como símbolo de libertad, de sueños, de anhelos... Y en uno de sus relojes, el referenciado como G0A32086, muestra deslumbrantemente la belleza de los diamantes.

Piaget ha querido revestir su colección de joyería Possession de un aura especial con su diseño. Es una gama de anillos, de pendiente, de colgantes, de brazaletes e incluso de un reloj con un punto en común: el mágico giro. Una pieza móvil, la de ese anillo tan atrayente, que detiene el tiempo con ese gesto tan consenciente o inconsciente, tan único, tan adictivo, tan natural cuando pasa a formar parte del día a día.

La firma joyera ha querido significar ese gesto, el de la rotación del anillo o del resto de piezas móviles de la serie de accesorios, como «una aspiración epicúrea, un ideal de emancipación, un sentido de seguridad en uno mismo, una sonrisa y asentimiento a la vida...». Un símbolo de elección, de libertad, que bien puede transformarse en un modo de reivindicar los sueños, de dar rienda suelta a la fantasía. Un modo de transformar la realidad y convertirla a placer.

Pero no sólo eso. Porque Possession sirve también para mostrar, en todo su esplendor, la belleza única que poseen los diamantes. En uno de los relojes que forma parte de la colección, el que conocemos por la referencia G0A32086, queda más que patente.

En sus 34 milímetros de diámetro los diamantes son prácticamente los únicos protagonistas. En la caja, de oro blanco de 18 quilates, se encuentran engastados 76 diamantes talla baguette de aproximadamente 2,4 quilates y 32 diamantes talla brillante de aproximadamente 4,9 quilates. También en su bisel, que gira manteniendo la magia de la colección. Pero todavía hay más.

La esfera de este reloj se encuentra igualmente tapizada por 56 diamantes baguette de aproximadamente 2,7 quilates. Y el brazalete, por sorprendente que parezca. En él, son 432 diamantes baguette los engastados, más de cuatro centenares de estas piedras preciosísimas con cerca de 25,9 quilates. La pulsera, faltaría más, es también de oro blanco de 18 quilates. Un espectáculo brillante, un alarde de artesanía, un derroche de lujo. No hay mejor homenaje a los diamantes. No hay mejor homenaje a la alta joyería más exclusiva.

Toni Castillo
Toni Castillo

La curiosidad a veces me pierde y la inquietud hace que me embarre. Pero sin la una y la otra no sería lo que soy. Me gusta lo sencillo, lo simple, tener respuestas y, si no las encuentro, sacar enseñanzas. Levantarse si se cae. Andar y no parar. Sin la tecnología no sería nadie, pero sin un pedazo de papel y un lápiz me encuentro perdido. De ciudad, pero de campo. De mar, pero de montaña. Hedonista de las pequeñas —y a veces grandes— cosas. Definirse no es sencillo, pero al menos lo he intentado.