La extrema delgadez del Altiplano Chronograph
Piaget

Piaget Altiplano Chronograph, un cronógrafo doblemente delgado

Relojes

Piaget ha logrado fabricar el cronógrafo manual más delgado que existe, el Altiplano Chronograph, y lo hace consiguiendo el calibre más delgado junto con la caja más delgada, 4,65 y 8,24 milímetros respectivamente.

Si por una cualidad destacada puede ser definida la colección Altiplano de Piaget es por su sutileza temporal. Unos rasgos sencillos, puros, esenciales, que convierten los relojes con este nombre en piezas que permanecen a lo largo del tiempo si advertir vejez alguna. Altiplano Cronógrafo, una de sus últimas incorporaciones, lo pone de manifiesto por enésima vez.

Presentado aprovechando la celebración del 25 Salón Internacional de Alta Relojería, es el crono manual más delgado que actualmente existe en el mercado. Este tipo de cronógrafos se reservan para piezas de líneas enteramente tradicionales, que perpetúan las más clásicas formas, pero la manufactura ha decidido hacer una excepción y alojarlo en una caja que pasará a la historia.

Trasera con el calibre 'flyback' de cuerda manual 883P a la vistaPiaget

El Altiplano Chronograph revalida el liderazgo de la delgadez extrema que ostenta Piaget con un récord doble, consiguiendo con el nuevo calibre flyback de cuerda manual 883P unos escasos 4,65 milímetros y para el receptáculo que lo acoge 8,24.

El desarrollo del cronógrafo duró en torno a los dos años y tuvo lugar en La Côte-aux-Fées, lugar de la manufactura de la casa, consiguiendo lo que hoy podemos disfrutar. Un ejemplar único que además de brindar una marcha de 50 horas, dispone de un pequeño segundero a las 6, un contador de 30 minutos a las 3 y un indicador para otro huso horario con indicación de 24 horas a las 9.

Altiplano Cronógrafo visto al completoPiaget

El trabajo de ingeniería relojera es visible a través del fondo trasparente de la caja, donde puede disfrutarse además de sus acabados, como la tradicional platina perladas, los puentes viselados, las Côtes de Genève o los tornillos azulados.

El guardatiempo se remata con una esplendorosa esfera, con acabado satinado, distinguidas manecillas de estilo bastón y unos indicadores horarios sencillos y dobles, que destacan lo justo e imprescindible en la contemporánea caja de 41 milímetros de diámetro. La correa del Altiplano Cronógrafo, de piel de cocodrilo, se equipa con una hebilla de tipo pin. El cronógrafo puede encontrarse en oro rosado o blanco con engaste de 56 diamantes de talla brillante.

Toni Castillo
Toni Castillo

La curiosidad a veces me pierde y la inquietud hace que me embarre. Pero sin la una y la otra no sería lo que soy. Me gusta lo sencillo, lo simple, tener respuestas y, si no las encuentro, sacar enseñanzas. Levantarse si se cae. Andar y no parar. Sin la tecnología no sería nadie, pero sin un pedazo de papel y un lápiz me encuentro perdido. De ciudad, pero de campo. De mar, pero de montaña. Hedonista de las pequeñas —y a veces grandes— cosas. Definirse no es sencillo, pero al menos lo he intentado.